HTC Smartphones ha conseguido que un equipo de barrio juegue una final de la Champions con la mismísima 'orejuda' oficial de la UEFA de cuerpo presente. La compañía electrónica ha roto el molde con una innovadora campaña sin precedentes que ha revitalizado a la Sociedad Recreativa Villaverde Boetticher Club de Fútbol, club instalado en división regional preferente de Madrid.
Bajo el lema de 'Hoy todo cambia', la empresa de Smartphones ha hecho una inversión aproximada de 100.000 euros para construir un estadio de césped artificial, remodelar por completo los vestuarios y renovar las equipaciones. El estadio, construido por la empresa Mondo, ha costado 300.000 euros y HTC ha cubierto el 30% de la construcción.
Presupuesto de 15.000 euros
El Villaverde Boetticher es un club modesto que tiene una respetuosa rivalidad con sus vecinos del Racing Villaverde, ambos instalados en el barrio de Villaverde, zona obrera y hasta marginal de Madrid. Con esta tesitura llegó hace 45 años Juan Antonio Cosas, presidente del club, bajo la premisa de “educar a los niños y alejarlos de la mala vida a través del deporte”. “Tenemos una función más social que deportiva, es un barrio marginal con familias desestructuradas”, dice Cosas.
El Villaverde tiene un presupuesto de 15.000 euros anuales y lucha por ascender a Tercera División. “Hace cinco años, el equipo logró el ascenso pero no pudimos acceder a la categoría porque los costes se disparaban y porque no teníamos campo de hierba”, explica Sergio Fernández, director deportivo del fútbol base del club, también en declaraciones a Diario Gol.
Se han apuntado 200 niños nuevos al club
El impacto en el barrio “ha sido bárbaro”, concreta Sergio: “El club estaba destinado a desaparecer, como aquel que dice, se nos iban los jugadores a equipos con campo de césped... La llegada de HTC ha supuesto una corriente de ilusión”. “Desde entonces se han apuntado unos 200 niños y se ha creado hasta una lista de espera”, recalca el presidente del Villaverde.
Los jugadores pudieron hacer su sueño realidad el 17 de diciembre de 2013 y jugaron su particular final de la Champions, en la inauguración del estadio, con el emblemático himno a todo volumen. “Nos compinchamos con la UEFA para traer la Champions”, explica una persona de HTC, que patrocinará la camiseta del equipo el año que viene. “Este año no podía ser porque teníamos un contrato en vigor con la empresa Itasa y hay que ser respetuoso”, concluye el presidente Cosas.
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